miércoles, 7 de mayo de 2008

"Ya aprendimos con los años que la justicia sólo se hace en el corazón. No sé si vas a caer, sólo sé que el amor es tenaz y vuelve a salir como el sol.
Se desmoronó tu techo, te disparaste con la vida al pecho. El agujero en el que caíste tiene exactamente tu medida.
Quizás en tus garras estuvo Haroldo Conti, pero cómo ibas a saberlo, si además de todo sos un pobre pedazo de brutalidad desinformada.
A los capellanes que te dieron falsas prédicas dios ya los puso aparte. No llegan a ser ni siquiera hijos del infierno.
En este mundo apredimos a ajusticiar a un ilegal sin documentos y a perdonar al que tiene licencia para matar. Los hechos superan las palabras y pisotean la inocencia de nuestros hijos. Pero bajo la piedra pesada de los tiempos, la flor va a darnos su escándalo.
Ya aprendimos con los años que la justicia sólo se hace en el corazón. No sé si vas a caer, sólo sé que el amor es tenaz y vuelve a salir como el sol. "

El arrepentido, León Gieco

1 comentario:

NuMaN dijo...

Poca gente dice las cosas como León.Saludos!