miércoles, 21 de mayo de 2008

Una Briseida

Lo no visto. Lo no dicho. Llora su propio dolor. Llora su propio dolor. Llora su propio dolor.
Se desmoronó su techo. El agujero en el que cayó le queda chico. Desaparece para amoldarse. La amasan y moldean a golpes.

Su razón de ser
es no ser.
Reja de piel
la mantiene en la tierra de gusanos y sol.
Ella tiene un sol. Ella renace del fuego y tiene un sol. Aunque se vista de cenizas.

Cuando viene llegando, su sol se acurruca en su pecho. Sus manos le limpian la sangre. Ajena. Sus labios se arrastran. Se deja mover. Se deja caer. Su cuerpo como un cuerpo. Ella se deja. Pero tiene un sol.


Pero tiene un sol.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Juli!
ahora sí lo veo, y dejo mi huella.
Tengo bronca de no haber podido ir!
Cuando te conectes te cuento. También le voy a mandar un mail a Lai sobre el tema.
Te adjunto un beso!
Jony

Gustavo Meillon dijo...

Hola Juli... mi nombre es... bueno en la red soy KIB quiero decirte que tu blogg me parece muy interesante... tu personalidad se imprime muy bien en cada uno de tus escritos... muestra un caracter melancolico pero con esperanza, suerte... ojala puedas darte una vuelta a mi blogg

www.guerrerosdelafenix.blogspot.com