domingo, 6 de abril de 2008

Es el dueño del tiempo. Una vez se ahogó. Una vez burló las agujas y la ausencia de aire. Cuatro minutos esperó. Nunca había aguantado la respiración más de treinta segundos, pero ese día decidió que el tiempo cronometrado no existía, dobló las agujas y resistió. Y sobrevivió. Ahora es el dueño del tiempo, el director de orquesta de los segunderos desterrados de sus números.

3 comentarios:

Paula Amengual dijo...

todo muy dark juli, muy dark
La vida es un carnaval dijo Celia Cruz.
No me puedo acordar como decía esa canción.
Por algo será.



Te mando un besotee

Julieta Bergunker dijo...

Si, no? Me estaba releyendo.. (un poco de vez en cuando está bueno).. y realmente, no sé por qué. Será que últimamente me pinta pintarme oscura.
(que no te engañe mi pollera, es sólo la fachada)

Flor dijo...

que la vida es un carnaval, y las penas se van cantando.

aún así me gusta, el tiempo es un buen tópico.

hola!